top of page

FANTASÍAS ANIMADAS. 

Pasaron setenta y cinco minutos de las doce, ya casi no se oye pirotecnia, alguna explosión aislada llega como un eco. De la radio sintonizada a todo volumen sale una cumbia vieja que más que una canción parece un sollozo. Algunos todavía bailan transpirados por el alcohol y por el calor, pero más por el alcohol. Sentado en la mesa, rodeado de sidra ya caliente, con los corchos, los morriones, los paquetes vacíos y las servilletas crea personajes para historias inventadas.

Elias Leiro para Ciertos Destellos

DSC_0141.jpg
bottom of page